No debería postear con el trabajo que tengo...

Estoy contra reloj...



No sé porque me vinieron unas ganas indecibles de escribir. Je, me siento como si fuera a dar un gran paso, a cruzar la línea que divide el tiempo de la nostalgia... no lo sé.

El viernes 15 es el día de mi último examen. Es la primera vez en todo lo que llevo de la carrera que no acabo la última semana. Claro, falta el GRAN trabajo de filología (40 cuartillas en un equipo de cuatro batos) pero, en realidad, el último jalón lo estoy dando... el calendario apunta que los exámenes acaban el 23. JE, una semana de ventaja. =)


Tal vez (porque no hice el primer parcial, porque casi abandono algunas materias, porque la memoria no se edita, porque en esta clase dejé de estudiar, y porque...varias cosas más...) este sea el examen donde más me esfuerce y donde termine sacando la peor nota... estoy consiente. Mi madre dice que siempre digo lo mismo, pero, je, como le sucedió al pastor con el lobo: esta si es la de verdad.

Falta un día para que la generación se despida, gur bais. Para que tomemos chelas, cantemos "Paloma negra" y tal vez no volvamos a vernos...

Mientras tanto mensajes a las dos de la mañana, llamadas porque se perdió el archivo y mañana es la exposición, te paso el resumen tal por el cual, perdí el artículo de perengano, "todo va a salir bien" ya no más cafiaspirinas, étc.

No tengo tiempo de escribir, ya voy a apagar esta cosa.

Solo quería aventar piedritas al viento...

5 comentarios:

zzz dijo...

jajaja...el caos del fin de semestre... lo raro es cuando termina el caos, llega un momento de silencio, de tranquilidad que te puede volver loca, es cuando los dos extremos se intercalan.

Cheyo Pimienta dijo...

¡La escuela es infernal! pero es más infernal no tener nada que hacer en vacaciones...

Un saludo, Samia.

Sybila dijo...

Zoe: hola shicaaaaa! je je, me imagino que así andabas tú con tu tesis....uhu! bueno, ya, hoy entrego el último trabajo pero tengo tantos pendientes (je, que dejé por estas cosas) que no veo cuando habrá vacaciones... quiero ya un rato de silenciooooo. Gracias por tu visita y bienvenida siempre

Cheyo: Ya no te he visto en la red, y si te veo estás ocupado o yo soy un desastre... je, bueno, te mando saludines también por acá...te visito en tu blog en cuento mi cabeza se acomode (upssss, no, eso quizá no pase nunca, je, tonces te caigo por allí pronto)

Un saludo también!

Hoy entregamos filología uhuuuuuuu!

Leo Ávila dijo...

Es como con la lluvia, nomás cae y ya, uno no puede hacer nada, cerrar la ventanilla al lado, imitando la sincronización casi planeada de los demás pasajeros del micro, abrir un paraguas que no nos salvará de un Jetta rojo que pasa a toda velocidad y nos rocía con encanto, como padre de iglesia en plena bendición.
Así también cuando se tienen ganas de escribir.
Cuidado a donde arroja esas piedritas

Sybila dijo...

My dear! Je je, me debes una visita, toqué el sábado en el recital de Martha.. y no estuvisteee buuuu!

Je je, bueno, espero que ahora si nos tomemos un café o unos chocolates...mmm!

I miss you Leo!